dimarts, 8 d’abril del 2014

¿Que ha sido Mal de Escuela para mí?

Cuando empecé a leer Mal de Escuela, me sorprendió la forma en que el autor narraba los hechos. Me dí cuenta que no era un libro como los que suelo leer, es un libro diferente que para tratar un asunto tan importante como la educación lo hace de forma amena y anecdótica. En un principio no me sentí muy identificada con el concepto de zoquete que usa Pennac para referirse a él mismo en la escuela. Sin embargo, cuando llegó la parte del libro donde Pennac se encuentra con Natalie, con solo doce años, triste porque no ha conseguido nada en la vida, me sentí identificada. Nunca se me dieron bien las matemáticas, ya en el colegio las aprobaba con notas más bajas que las demás asignaturas y al legar al segundo ciclo de la ESO, aquello se volvió una tortura para mí. Recuerdo tardes enteras haciendo problemas que no conseguía resolver, intentando leer la teoría donde encontraría la clave para tales incógnitas, todo ello en vano. No entendía nada. La desesperación llegaba cuando me entregaban la nota de los exámenes, cada cual peor. Esos dos años ( tercero y cuarto de la ESO), tuve que ir a Septiembre a recuperar la asignatura. Después de todas las mañanas de todos los días de verano mi nota máxima apenas llegaba a 6,5. Era curioso, y me sentía estúpida puesto que las notas de las demás asignaturas eras muy buenas, con apenas esfuerzo, ya que estaba todo volcado en las dichosas matemáticas. Debo añadir que los profesores no acompañaban. Por desgracia esos años tuve que compartir aula con los más rebeldes del curso, así que cuando los profesores, sobretodo las de matemáticas, llegaban a clase, se dedicaban a leer y hacer problemas en clase, sin interaccionar con los alumnos, ya que algunos de ellos destorbaban y distraían a toda la clase. Es cierto que cuando hacían alguna de las suyas, todos nos reíamos y les seguíamos las gracias. Pero nunca ninguno de mis profesores intentó hacer nada para solucionar aquel "problema", se centraban en otras clases y aunque yo era de las más estudiosas de esa clase, preferían implicarse más con las otras clases de niños que no daban "problemas". No fue hasta primero de Bachillerato donde empecé a tener mejor relación con las matemáticas. Hay una parte del libro, donde Pennac dice "Basta un profesor -¡uno solo!- para salvarnos de nosotros mismos y hacernos olvidar a todos los demás". Pues ese profesor también apareció en mi vida. Ya he hablado de él en una entrada anterior dedicada a los mejores profesores, pero él fue mi salvación para matemáticas. Cuando llegué y le explique mis dificultades, me dijo "Darrere de l'ú el dos", y cuando le comenté la aversión que sentía por las matemáticas me dijo: "Es un llibre xiqueta, a ningú li agraen els llibres, jo preferixc una paella. Els llibres es lligen, no es mengen, es lligen i s'entenen". Leer i entender, que curioso que nunca antes me dijesen, céntrate en leer y comprender antes de hacer las cosas. Llevaba tiempo sentada en clase viendo un problema detrás de otro en la pizarra y no sabía porqué estaban ahí, que relación tendrían con la vida cotidiana, como se llegaba a la conclusión de tales misterios... Sin embargo, él era diferente, me escuchaba y me respondía a todas mis dudas, y lo más importante, me animaba y me motivaba a seguir. Fue gracias a él como superé mis miedos a las raíces cuadradas, logaritmos, algoritmos y derivadas. Esta parte del libro, donde aparece la frase citada antes, en el Capítulo lo que quiere decir amar, ha sido muy importante para mí, porque me he sentido totalmente identificada. 
Por último y lo que más creo que me ha marcado, ha sido cuando al final, Pennac habla de la metáfora de las golondrinas, haciéndonos reflexionar. Cada alumno es diferente y como tal, no todos siguen el mismo ritmo. Frente a una situación así, siempre hay que ayudar a aquellos que más lo necesiten para hacer que salgan adelante, no podemos hacernos apartar la vista y mirar a otro lugar. Un mal alumno no es un fracasado, no es ni mejor, ni peor es alguien a quien hay que ayudar para que no se dé por vencido.

3 comentaris:

  1. Preciosa y precisa entrada! Ojalá ese profesor tuya la leyera. Leer y entender: creo que no se puede explicar mejor de que va esto de la educación. Bueno, quizá cabría añadir "hacer".

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  2. Gracias Miriam por esta entrada. Al final, además de aprender que es educar a través del movimiento, esta asignatura nos está sirviendo para conocer mejor a muchos de nuestros compañeros que nos están abriendo las puertas del alma. Lo dicho, muchas gracias.

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  3. Mui buena aportación. Me parece muy indicado eso de "leer y entender", ya que muchas veces le preguntas a personas que estudian muchas horas y luego no se reflejado en las notas, y simplemente es porque pierden el tiempo leyendo cosas sin entender, simplemente como si vieran una imagen.

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